La huelga portuaria ha llegado a su fin tras un acuerdo provisional sobre salarios y la prórroga del contrato hasta enero de 2025.
La decisión pone fin al paro que había paralizado los puertos de la costa Este y del golfo de México y amenazado el suministro de frutas, automóviles y otras mercancías.
El sindicato de estibadores estadounidenses y la Alianza Marítima de Estados Unidos han llegado a un acuerdo provisional sobre salarios y han prorrogado su actual contrato hasta enero de 2025 para dar tiempo a negociar un nuevo contrato.
La medida pone fin a una huelga que había paralizado los puertos de la costa Este y la costa del golfo de México desde principios de semana, y amenazaba el suministro estadounidense de frutas, automóviles y otras mercancías.
“La Asociación Internacional de Estibadores [ILA, en inglés] y la Alianza Marítima de Estados Unidos, Ltd. han alcanzado un acuerdo provisional sobre salarios y han acordado prorrogar el Contrato Marco hasta el 15 de enero de 2025 para volver a la mesa de negociación y negociar todas las demás cuestiones pendientes”, señalaron la Asociación Internacional de Estibadores y la Alianza Marítima de Estados Unidos en un comunicado conjunto.
En una declaración publicada por la Casa Blanca, el presidente, Joe Biden, dijo que “quiero aplaudir a la Asociación Internacional de Estibadores (ILA) y a la Alianza Marítima de Estados Unidos por unirse para reabrir los puertos de la costa Este y del Golfo. El acuerdo provisional de hoy sobre un salario récord y una prórroga del proceso de negociación colectiva representa un avance decisivo hacia un contrato sólido”.
Biden amplió que felicitaba a los estibadores del ILA, “que merecen un contrato fuerte después de sacrificarse tanto para mantener nuestros puertos abiertos durante la pandemia. Y aplaudo a los operadores portuarios y transportistas miembros de la Alianza Marítima de EE.UU. por trabajar duro y poner una oferta fuerte sobre la mesa”.
El presidente también dio las gracias a “los trabajadores sindicados, a los transportistas y a los operadores portuarios por actuar patrióticamente para reabrir nuestros puertos y garantizar la disponibilidad de suministros críticos para la recuperación y reconstrucción tras el huracán Helene”.
La huelga ya había empezado a poner presión sobre la cadena de suministro estadounidense. Miles de contenedores habían sido descargados en los puertos equivocados, y miles de millones de dólares en mercancías estaban anclados en alta mar porque los puertos no estaban operativos, informó previamente CNBC. Los costes del transporte marítimo ya habían empezado a subir.
La huelga fue la primera del ILA desde 1977, y afectó a las operaciones portuarias de 36 puertos diferentes, incluidos los 10 más activos de Norteamérica. Alrededor de 50,000 de los 85,000 miembros del sindicato estuvieron en huelga esta semana.
En un comunicado emitido a primera hora del martes, el presidente del ILA, Harold Daggett, declaró que el sindicato pedía un aumento de 5 dólares por hora para cada año del contrato de seis años.
